lunes, 28 de diciembre de 2009

Mi Navidad



Llevo algunos días metido en un extraño desaosiego. No se me ocurre nada que escribir y mi único compañero del camino de mi vida, es el silencio. El silencio que tan necesario se hace a veces, al que tan bien sienta recibir después de varios días de extremado ajetreo. Ahora, de vez en cuando, veo la tele.

Karmele Marchante, aquella periodista seria de antes de nacer yo, ha desaparecido por completo de la televisión. Ahora vemos una tía consumida por los tranquilizantes, que se toma debido a su desesperada y estresante búsqueda del silencio. Cada 2 minutos intenta llamar la atención, ahora le ha dado con cantar. ¿Ustedes piensan que semejante individua igualará al gran Rodolfo Chikilicuatre?


Tengo ganas de volver a jugar al baloncesto. Tanto verlo por la televisión me pone de un ansioso que no veas. Joder, no me sabía adicto a algo. Menos mal que me quedan sólo dos días para volver a los ruedos, que si no lo mismo tendría que bajarme al parque, a ver si mi amigo el traficante de basket tiene algo con lo que superar, o por lo menos calmar, mi mono.

"No luches para vivir, vive para luchar"

ERES MI RINCÓN FAVORITO DE MADRID...

1 comentario:

  1. Para no encontrar nada de lo que escribir, has escrito una estupenda entrada acerca de la nada televisiva.
    Que encestes bien.

    ResponderEliminar